martes, 17 de agosto de 2010

REFLEXIÓN SOBRE SUCRE

REFLEXION POR EL DEPARTAMENTO DE SUCRE.
SEÑOR DIOS DE JESUS Y DIOS NUESTRO
Hoy estamos aquí pidiéndote que bendigas y llenes de gloria a nuestro Departamento de Sucre. Que protejas y seas misericordioso con cada una de sus regiones particulares.
Que la justicia y la paz moren en los habitantes de los Montes de María, que tanto han sufrido los dolores de la más cruel violencia, el desplazamiento forzado y en muchos casos  la pérdida de la tierra y el rumbo de sus vidas.
Acuérdate de bendecir Señor, la sangre morena que se bate por la supervivencia en la mezquindad de la mar, en la esterilidad de las arena y en los intrincados manglares del hermoso golfo del Morrosquillo
Buen Señor te rogamos bendigas a cada hombre y a cada mujer que al despuntar el sol se enfrentan a la extensa y calurosa sabana del centro del departamento en busca del alimento y un mejor bienestar para sus familias.
No te olvides amigo Jesús, de aliviar el dolor y la incertidumbre, de llenar de esperanza a los hijos del agua, los mojaneros, que codo a codo  luchan todos los años, no sólo para vencer sus propias penas y el olvido del Estado, sino también la inclemencia de fluctuante  de la madre naturaleza; llénalos con tu Espíritu Señor, confórtalos con el Don  de fortaleza, para que venzan todas sus adversidades y puedan disfrutar de la abundancia de los frutos de la tierra más fértil del mundo.
Dios de Jesús, Dios de amor, justicia y libertad. Estamos aquí, niños, niñas, jóvenes, hombres y mujeres de la región del San Jorge para bendecirte, alabarte y darte gracias por las inmensas maravillas y riquezas  naturales que nos has regalado y que en muchas ocasiones no hemos sabido apreciar y valorar.
Señor, tenemos la seguridad, la certeza y la fe que estás en medio de nosotros, como lo prometiste a tus discípulos,” cuando uno o más se reúnen en mi nombre, allí estaré en medio de ellos.” Creemos en esa promesa, por esa estamos firmemente seguro que eres uno de los nuestros que compartes con nosotros minuto a minuto el rigor del calor y las alegrías de nuestra jornada vespertina. Por último buen amigo, que el Espíritu Santo siempre nos guie y proteja a cada uno de los miembros de la gran familia de la Institución Educativa Gimnasio del San Jorge. AMEN.
                                            Por. Ruber Enrique Ledesma  Arroyo.

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